sábado, 5 de enero de 2013

¡La culpa es de...!

Imagen de Google
Venezuela vive constantemente en un tira y encoge, los buenos son malos, los malos son buenos, las acusaciones van y vienen como olas del Mar Caribe que bañan nuestra zona norte, si lo dejamos al criterio del colectivo, en nuestro país nada sirve, todo es un caos y no hay personas buenas, confieso que los dos primeros puntos no están alejados de la realidad, mientras que el tercero con las descalificaciones nos encargamos de hacerlo cierto.

Basta leer la historia de Venezuela para encontrarnos con decenas de personajes y situaciones "culpables" de algo, perdidas de la republica, derrotas en batallas, muertes, desapariciones, golpes de estado, pobreza, corrupción, contaminación, destrucción, etc. Siempre buscamos un culpable, verdadero o no, no importa, culpable es culpable y a él, todo el peso de las criticas o comentarios, porque de la ley no es todo el tiempo. Si bien es cierto algunos personajes han tenido la culpa de los males que nos aquejan, nunca nadie a dicho, “por mi culpa ocurre esto” el pueblo soberano tampoco en conjunto ha dicho “por nuestra culpa e inocencia nos jodimos” es decir, nadie resulta ser responsable de sus actos, sale mas barato y mejor, acusar a otro.

La situación actual tiene muchas aristas, quizás la mas importante no es tomada en cuenta como se debería, si ha sido comentada, pero creo que nunca nadie ha profundizado en ella.. se trata de la pobreza, no a la que lleva la falta de dinero, me refiero a la mental, con esto no quiero decir que no somos inteligentes, fíjese que si, le daré un ejemplo, ¿recuerda usted cuantas veces se han cambiado los sistemas para usar los teléfonos públicos? Cuando migramos de las monedas a las famosas tarjetas magnéticas, nos inventamos la forma de hacer que nunca se consumieran usando papel aluminio y pintura de uñas, luego les pusieron chip y tapándolo con un pedazo de placa de radiografía o un material parecido con la forma de la tarjeta, servia para mantener el saldo, a este tipo de cosas muchos le llaman “viveza criolla” yo mas bien le llamo descomposición, de la cual todos, incluyéndome, somos culpables, a eso nos lleva la pobreza mental, porque ese tipo de cosas tan pequeñas no han impulsado a cometer otros delitos, no se moleste, no le quiero decir delincuente, pero cuando se rompe toda norma o ley, es un delito y aquí lo hacemos a cada rato, pero como ya comenté, es mas fácil buscar un culpable antes que hacer un “mea culpa” y reflexionar al respecto, VENEZUELA está como está por todos nosotros, no por uno, dos, tres o por los cuarenta años, que sumados a los últimos catorce ya pasan los cincuenta y contando.

Ya para cerrar este post, me voy a referir a una situación que mantiene en vilo a todos, la condición del presidente, tanto y poco se ha dicho, que incluso unos han puesto en la palestra que la “CIA” esta detrás de la enfermedad de Chávez, que por su culpa, él y otros presidentes sudamericanos se han enfermado, yo en mi vulgar análisis y desconociendo de medicina, puedo opinar que el presidente esta enfermo por culpa de opositores y seguidores, los primeros por frustrados y entregados, los segundos por permisivos y aduladores, ambos grupos con sus actitudes alimentaron su ego, y en ultimo lugar, su propia culpa, por su ambición de poder.

@alfonzoprieto

jueves, 3 de enero de 2013

"El venezolano y sus modas"

       Venezuela sin dudas es uno de los países en América Latina que rápidamente se contagia de las grandes modas del mundo, siempre queremos estar a la vanguardia sin importar si tecnológicamente estamos aptos, si nuestro clima es el adecuado, la idiosincrasia lo permite o si estamos educados para seguirlas, no es necesario salir a la calle para ver esta realidad, haga el ejercicio de mirarse y analizar su entorno. Es muy probable que tenga un televisor de última generación muy cerca, una computadora, “Table” o Smartphone donde me lee y lleva perfume, reloj, camisa, pantalón o zapatos en voga.

Podemos ir más allá, usted quizás trota, va al gimnasio, consume productos dietéticos, lee la revista mas nueva del mercado y el libro más vendido, hace yoga, es analista político, ecologista, pertenece a una fundación que protege a los animales, es payaso de hospital, antiimperialista-anticapitalistas, pacifista-socialista, toma vino, viaja a “X” destino, come sushi, escribe en una red social y tiene un blog como yo, ¡si, como yo! Y me refiero a mí porque tampoco escapo a estas cosas.

Profundizando el análisis podemos observar que más somos lo que “meamos fuera del perol” como se dice coloquialmente, que aquellos que verdaderamente tienen necesidad, vocación, convicción e interés de usar o participar de ciertas cosas, es difícil entender como alguien que tiene un tv LED no lo conecta a una antena satelital o a una operadora de cable, ¿cómo es que el que usa objetos de lujo gana sueldo mínimo? unos se visten o calzan con marcas foráneas (muy caras) cuyas colecciones vienen por temporadas Primavera-Verano, Otoño-Invierno, cuando en Venezuela solo hay temporadas de beisbol, futbol y básquet, porque nuestro clima permite dos épocas: lluvia y sequia, ¿cómo es que una persona con un “Smartphone” no le tiene plan de datos y solo puede conectarlo a internet si consigue una red wifi en casa de una amigo, en el trabajo o la señal del vecino? muchos “leen” grandes revistas y libros pero escriben con errores ortográficos, unos deportistas se molestan si frente a su casa juegan pelota los muchachos de la urbanización o barrio, hay quienes están en contra de las corridas de toros, toros coleados y peleas de gallos, pero los ves a la orilla del mar comiendo empanas de Cazón, sabiendo que es un tiburón pequeño y que estos animales están protegidos mundialmente, también puede que en casa tengan un ave enjaulada, un perro que no bañan o un gato que no alimentan, van a los parques nacionales dañan el ecosistema, en las calles botan desperdicios y en navidad encienden pirotecnia, entre ellos los llamados globos de los deseos que al caer a tierra o en un árbol pueden causar incendios, otros por su parte son payasos de hospital y en su hogar no le sacan una sonrisa a nadie o tal vez se molestan cuando les toca cuidar a un familiar enfermo.

Los analistas políticos muchos no votan, los antiimperialistas-anticapitalistas usan objetos de grandes marcas que pagan miseria por la mano de obra en países pobres o explotan territorios para obtener la materia prima que les permita la elaboración de esos productos, los pacifistas-socialistas declaran “Intifada” y lloran por muertos en sitios como Palestina, pero no por los que a diario matan en nuestras calles, apoyan al movimiento “Indígnados del mundo” pero aquí no pueden haber, los que toman vino, así sea el más piche y barato, lo prefieren antes que un buen ron venezolano que son famosos y caros en el orbe, de los que viajan a países “X” muchos no conocen ni el 10% de nuestras bellezas naturales, los come Sushi, puede que lo ingieran obligados para no quedar mal delante de los amigos y aquellos que escribimos en redes sociales quizás es por lo mismo o porque tenemos cierta dificultad para relacionarnos personalmente.

Como venezolanos deberíamos pensar seriamente en todo esto, solo escribí algunas cosas de las que a diario podemos encontrarnos, muchas preguntas pueden surgir de este escrito, pero le voy a dar la oportunidad de que usted mismo las redacte, responda y analice, yo simplemente haré una ¿estamos actuando como nosotros y el país lo necesita?